Alberto Manuel León Pacheco
Para muchos camagüeyanos el cambio del primer secretario del Partido fue una buena noticia. El comentario ya llevaba “rodando” varias semanas. “Ahora sí va a haber viandas, el transporte mejorará”, en fin, muchos pensaron que se verían las mejorías que se aprecian en Ciego de Ávila. Sin demeritar la labor de Julio César García, muchos esperan, en mi opinión, demasiado de Jorge Luis Tapia.
Sin ánimos de quitar la esperanza que impulsa, debo decir que Camagüey no es Ciego de Avila, hay diferencias notables: es más grande, más conservadora y reacia a cambios.
Pocos dirigentes pueden blasonar de levantar tal revuelo popular, solo conozco de otro: Lázaro Expósito. También están los rumores de que Tapia recorrió la ciudad de incógnito para ver como estaban las cosas, que estaba en Coppelia, que si montó guaguas, etc y todo esto sin haber empezado a trabajar en Camagüey.
Para mí, que visité Ciego de Ávila, si esto se parece a aquello sería muy bueno: muchos lugares para salir, comida barata y en cualquier restaurante o cafetería, las calles limpias, los centros estatales pintados y en buen estado. Realmente sería un gran alivio que esto cambiara y todas esas cosas pasaran. Sin embargo, siendo realistas, sabremos que Camagüey es una ciudad muy vieja y que repararla es muy complicado. Ciego es más chiquita y reciente, así que arregalarla era relativamente más fácil.
En el tema de la comida y el transporte igual no es lo mismo transportar una población de 365 mil como la de la tierra agramontina que a los111 mil que viven en la capita provincial avileña. Con la comida pasa igual. No se pude esperar que el hombre haga milagros. Sin ser pesimista, solo espero que logre poner en movimiento a esta provincia y que se hagan cosas para el pueblo, sobre todo en moneda nacional, cosa que más gustó de la tierra de la piña.
Aquí tenemos muy buenos centros pero la mayoría en CUC, y muy pocos ganamos en esa moneda. Por lo pronto me declaro seguidor de Tapia. Espero que le esperanza levantada tenga una contraparte y todos tengamos un mejor Camagüey.
Super Cuba 
Como tú, soy de las que voy a seguir a Tapia incondicionalmente porque su objetivo fundamental es garantizar mejor calidad de vida al pueblo camagueyano. Pero me queda claro que para que se logre ese propósito que muchos aplauidiríamos, es necesario el concurso, si no de todos al menos de muchos de nosotros. Parafraseo a José Martí: Haga cada cual la parte del deber que le corresponde y nadie podrá vencernos.
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No pude impedir que se aguaran mis ojitos, me duele bastante sentir que las esperanzas del pueblo camagueyano no se solidifiquen, por lo pronto, igual que tu, seguiremos a Tapia, ojala si pudiera hacer milagros, muchos como yo, que llevamos tiempo sin vivir en camaguey, esperamos graduarnos para regresar a nuestra comarca.
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