Alberto Manuel

Alberto Manuel León Pacheco

Mi nombre es Alberto Manuel León Pacheco. Nací en Mola, un poblado del norte de Camagüey con 1300 habitantes aproximadamente, el 7 de julio del año 1989.

Días después Fidel Castro anunció el derrumbe de la URSS. Comenzaba una etapa de la que muchos dicen que no hemos salido «el período especial».

Realmente el apartado rincón donde vivía y mi corta edad, no me dejó ver el periodo especial. Por suerte para mí a los 8 años dejamos el monte gracias a que mi madre cambió de trabajo y fuimos a vivir para la cabecera municipal, Minas.

Allí terminé mi infancia y llegué a la ciudad de Camagüey a estudiar en el IPVCE Máximo Gómez Báez. Mi interés por el conocimiento y la escritura me llevó a probar suerte en el periodismo y ahí voy, tratando de aprender toda la teoría posible.

Quién iba a decir que este cubano nacido en un batey macondiano donde solo había un puñado de casas y todos se dedicaban a la agricultura o la ganadería, llegaría a conocer de la Grecia antigua, de Sartre ,» Wichi» Nogueras, Kafka, Retamar o conocer ese invento genial que mis familiares cercanos no entienden por mucho que trate de explicarles y que se conoce mundialmente como Internet.

Escribir sobre la realidad cubana es difícil. La blogosfera está saturada de blogs y sitios sobre Cuba. Unos atacan de lleno al gobierno cubano, otros se limitan a escribir sobre temas cotidianos de la realidad insular y otros a apoyar al gobierno y su sistema.

Creo que no abordar nuestra realidad de forma crítica y adoptar una escritura complaciente o cuando menos ajena a nuestros problemas es dañina al proyecto de sociedad que pretendemos construir.

Llevado de la mano por la posibilidad de escribir mis trabajos siendo mi propio editor y de llegar hasta donde me quieran leer me inicié en la web el 1 de febrero de 2011 cuando publiqué mi primer artículo en Súper Cuba.

Mi interés es mostrar la Cuba de adentro. Puesto que vivo la mayor parte del tiempo (domingo a viernes) con mis abuelos, tengo de primera mano la fuente de la cual sacar experiencias. Sus pensiones de jubilados son el sustento de los 3 y conozco los pases mágicos que hacen para llegar a fin de mes.

Mis abuelos Elva Martínez Pérez y Benjamín Pacheco Borroto.

Sé qué muchos se preguntarán de qué lado estoy. En esta avalancha mediática la posición es fundamental: si atacas al gobierno cubano los medios occidentales te darán el tratamiento de paladín de la libertad de expresión y si adoptas una posición a favor de la revolución seré difamado y crucificado por los mismos medios occidentales y por la llamada oposición.

No quiero ni las alabanzas a costas de ofensas, como sucede con ciertos bloggueros independientes, ni favores por mantener una actitud complaciente o inmóvil sobre mi realidad.

Ante tal encrucijada solo puedo decir que mi partido es el de la unión nacional, de todos los cubanos piensen como piensen y que día tras días le echan ganas a un país hermoso y a un pueblo único.

Soy revolucionario en el sentido de renovador de ideas y fórmulas que mejoren esa vida que a ratos se torna difícil. La revolución es algo más que un concepto o un movimiento político. Enriquecerla con ideas frescas es el deber de los jóvenes formados por ella.

Quiero lo mejor para mi país y su gente. No soporto la mediocridad de las informaciones y personas que hablan sobre Cuba y que aparecen cada hora en la red de redes y ofenden la historia, la cultura y a los cubanos.

Súper Cuba es un esfuerzo personal por las horas que pasé haciéndolo y el placer que me da poder compartir mi visión con los lectores es inmenso. Se puede compartir mis ideas o no estar de acuerdo.

Cualquiera puede dejar sus comentarios sobre lo que escriba y entrar en debate. Los comentarios serán bienvenidos y publicados sin moderar, solo se eliminarán las palabras obscenas u ofensivas al autor u otras personas, sean cual fuere su posición.